Clase de cocina vegetariana

Inscripción aquí


Libro: Recetas vegetarianas para principiantes

Promoción en Sede La Castellana Octubre de 2017.

SALUD
Ser vegetariano per se, no garantiza tener buena salud. Sin embargo, al serlo, minimizamos algunos riesgos, entre otros: se elimina el consumo de grasa animal que causa la elevación de la tensión arterial; de forma natural se aumenta el consumo de fibra mejorando el tránsito intestinal y facilitando la eliminación de toxinas cuya acumulación es precursora de cáncer de colon; aumentando el consumo de diversos vegetales ingerimos en mayor cantidad los benéficos antioxidantes que previenen el cáncer. Una dieta vegetariana variada y debidamente equilibrada, aporta al organismo los niveles necesarios de nutrientes que necesita.

ESPIRITUALIDAD
Esta sensibilidad incluye otros aspectos más sutiles. La percepción de sustancias no vegetarianas cambia, instintivamente se prefieren verduras, cereales y frutas. Una dieta vegetariana es especialmente beneficiosa si se pretende incrementar la claridad, la concentración y el planteamiento sutil que exige el progreso espiritual.
La dieta vegetariana tiende a mantenernos más cerca de nuestra espiritualidad, nos proporciona equilibrio interno y emocional, tranquilidad en la conciencia y claridad en la mente. Se dice que: “Según come la persona, así piensa. Según piensa, así es como actúa”.

SALUD
Ser vegetariano per se, no garantiza tener buena salud. Sin embargo, al serlo, minimizamos algunos riesgos, entre otros: se elimina el consumo de grasa animal que causa la elevación de la tensión arterial; de forma natural se aumenta el consumo de fibra mejorando el tránsito intestinal y facilitando la eliminación de toxinas cuya acumulación es precursora de cáncer de colon; aumentando el consumo de diversos vegetales ingerimos en mayor cantidad los benéficos antioxidantes que previenen el cáncer. Una dieta vegetariana variada y debidamente equilibrada, aporta al organismo los niveles necesarios de nutrientes que necesita.

ESPIRITUALIDAD
Esta sensibilidad incluye otros aspectos más sutiles. La percepción de sustancias no vegetarianas cambia, instintivamente se prefieren verduras, cereales y frutas. Una dieta vegetariana es especialmente beneficiosa si se pretende incrementar la claridad, la concentración y el planteamiento sutil que exige el progreso espiritual.
La dieta vegetariana tiende a mantenernos más cerca de nuestra espiritualidad, nos proporciona equilibrio interno y emocional, tranquilidad en la conciencia y claridad en la mente. Se dice que: “Según come la persona, así piensa. Según piensa, así es como actúa”.

Leer más

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.