Participar del retiro El Poder del Autoliderazgo, ha significado una experiencia bastante enriquecedora en mi camino y búsqueda del cultivo interior. Como psicóloga he participado en bastantes eventos de crecimiento personal y espiritual, y sin duda alguna este constituye uno de los más valiosos por varios motivos, en primer lugar por mi momento vital, cada ser humano escucha cuando escucha y ve cuando ve, todos los momentos de la vida no son igualmente propicios para que una semilla de estas cale en lo más profundo. Me sentí identificada con cada una de las actividades del retiro un verdadero encuentro con mi esencia, un escenario maravilloso para reconectar con mis ser natural de amor, para revitalizar mis motivos y propósitos en este sendero vital. En segundo lugar tanto metodológicamente como en contenidos, muy actualizados en la evolución del pensamiento sobre estos temas, el llamado desde lo individual, pasando por lo grupal y lo colectivo hacen una armoniosa combinación de vivencias, de contracción y expansión espiritual, que nos invitan a conectar permanentemente la construcción interna con la mirada apreciativa del otro.
En tercer lugar y quizá lo más valioso, el grupo de facilitadores del encuentro, seres con una hermosa construcción que brilla en su mirada, la danza suave, delicada y amorosa de Kitzia, la presencia plena de Noni, su sonrisa juguetona, siempre profunda y delicada en sus acciones y análisis con la disciplina amorosa que hizo posible un excelente aprovechamiento del tiempo. Antoine, un ser igualmente bello con su mirada cálida cercana y dispuesta a ayudar. Anabeli, una presencia de principio a fin cuidando detalles necesarios para la participación y disfrute de los asistentes. Clarita ser maravilloso quien nos subió al sol con sus palabras llenas de luz, La directora del Sitio que lamento mucho no recordar su nombre, pero si su presencia sencilla, llena de paz , amor y reverencia por el encuentro; las meditaciones todas muy especiales, recuerdo la de la persona que guía en Manhattan, indescriptible fuerza en su presencia, Marcelo con su sonrisa y calidez …en fin se me pasan seguramente muchos otros nombres ..Colet tal vez ..la mujer preciosa que acompaña el nacimiento de las flores ..momento sublime el de la siembra … y el hombre de la guitarra que acompaño el silencioso camino hacia nuestro centro, simbolizado en el laberinto… y cada uno de los compañeros de camino con amorosa disposición a participar y compartir.
Gracias Brahma Kumaris por esa semilla de amor que esparcen en cada encuentro, estoy plena, liviana y muy agradecida con la vida por brindarme este regalo maravilloso
Con todo el cariño que recibió mi corazón…
Luz Elena Arango
